INTRODUCCIÓN

Generalmente cuando se habla de apicultura se la relaciona con la producción de miel, pero no todas las regiones son aptas para basar el desarrollo de una empresa solamente con este producto, pues existen alternativas como la producción de polen, jalea real, propóleos, material vivo primicia, o la combinación de algunos de ellos.

Para conocer cual es el paquete tecnológico que se aplicará a una determinada zona, se debe conocer primero el potencial de la región en cuestión.

En el siguiente trabajo, se estudia las características geográficas y climáticas del Distrito Malabrigo, lo que determinará la presencia de la flora característica, acorde al clima y los regímenes pluviométricos anuales.

El conocimiento de la flora apícola de la zona permitirá predecir el comportamiento y la evolución de la colonia, establecer la conveniencia de ciertas pautas de manejo, como conocer el momento oportuno de incentivar, armar núcleos, trasladar colmenas, etc. y definir el tipo de producción, ya sea miel, polen, jalea, propóleos, ceras, resinas y material vivo; como también las características de los mismos.

Apicultores que llevan años en la actividad, vieron la posibilidad que les ofrecía la naturaleza y actualmente un grupo de ésta localidad se dedica a la producción de material vivo primicia el cual es vendido al sur de nuestra provincia y provincias aledañas o bien a apiarios de la región que buscan ampliar el número de colmenas para aprovechar la floración de los cultivos agropecuario. 

DEMANDA DE MATERIAL VIVO EN NUESTRO PAÍS

En la Argentina existen 3.248.900 colmenas y se estima que el 85% de las explotaciones apícolas se encuentra concentrado en la región pampeana , con un número aproximado de 1.500.000 colmenas en producción, se considera a ésta como la principal demandante de material vivo en nuestro país.

Considerando una reposición anual del 10% a causa de la mortandad, se concluye que existe una demanda aproximada de 150.000 núcleos por temporada al igual que unas 500.000 reinas para reposición, demanda que actualmente se encuentra insatisfecha.

Si a esto se le suma la creciente adquisición de paquetes de abejas para fortalecer colonias, como así también para aquellos que se inician o amplían sus apiarios se puede asegurar que se presenta un futuro alentador para los materiales primicias.

La posibilidad de contar con material vivo de calidad garantizada y en el momento justo del ciclo de producción de cada región permitiría aprovechar el real potencial de cada zona productora de miel, por lo tanto, aquellos compradores que quieren recibir su mercadería  antes de que comience el flujo principal  tendrán que saber a quien comprar, encargando el material con anticipación y pactando la fecha de entrega con el vendedor.

 

MERCADO DEL MATERIAL VIVO

  Para poder producir miel se necesita material vivo y se debe intentar que la calidad y genética sea la mejor para ver reflejados en la producción los resultados.  Lamentablemente la demanda es mayor que la oferta, por ende, muchas veces se vende mala calidad de abejas, provocando resultados no buenos en el apicultor.

Para que el material vivo sea considerado de calidad debe reunir las siguientes características: 

Generalmente el material que se vende si es certificado garantiza un mejor resultado.

Esta certificación la emite el PROAPI.

PRINCIPALES CLIENTES

Los principales clientes de los productores de material vivo son:

Los núcleos producidos en la zona de Malabrigo son destinados, principalmente, al centro sur de la provincia de Santa Fe, como ser Sastre, María Juana y apicultores de la provincia de Buenos Aires.

Indice
GrupoMalabrigo 
Siguiente